¿Qué
es la vida? ¿A dónde vamos? ¿Qué es la felicidad? ¿Qué es el amor?
No
comiences con esas preguntas…sabes que no conocemos la respuesta.
Claro
que no, pues no existe una respuesta absoluta a estas preguntas, así como no
existe respuesta al canto de las aves ni deseos en las estrellas. Solamente
existe lo que está en nuestra cabeza; y ahí están las respuestas a tu absoluto.
Entonces,
¿Qué es la vida?
La
vida, querida voz que invade mi cabeza…
¡Tú
eres quien invade mi cabeza!
No
me interrumpas. Como te decía, la vida es aquello que nos cuentan nuestros
abuelos cada domingo, nuestros padres cada noche, nuestro aliento cada día. La
vida es aquella serie de sucesos interconectados pero no relacionados que nos
brindan el conocimiento de que hacer. Son escenas fugaces que se marchan por y
hacia nuestros sentidos para esconderse en distintas habitaciones, en distintos
baúles, en distintos instantes y recuerdos que a veces, olvidamos. La vida es
esto y aquello también. Lo es todo. Incluso es donde no la hay; esa es la vida.
¿Eso
es la vida? Suena tan simple, tan burdo, tan pasajero.
Pues…así
es la vida: simple, burda y pasajera.
Entonces,
¿A dónde vamos?
Eso
no lo sé. No se puede saber, no se puede suponer, no se puede inventar. A donde
vamos es un misterio que la vida nos esconde.
Nosotros
podemos crearnos una respuesta a esa pregunta.
A
todas menos a esa. Es imposible conocer tu destino ni aunque lo tengas todo
meticulosamente planeado. La vida, a pesar de ser simple, burda y pasajera,
esconde secretos y sorpresas que aparecen y desaparecen constantemente. A veces
no los vemos y a veces nos arrebatan todo, hasta la vida misma. Entre estos
secretos se nos esconde el destino, y no solamente el final sino todos los
destinos de nuestra vida.
Yo
conozco mis destinos de cada día.
No.
Nadie los conocemos porque todo está escondido en el plan maestro de la vida.
No sabemos si mañana nos levantaremos y escucharemos el cantar del mundo o si
nos quedaremos dormidos. No puedes saber a dónde vas ni el camino que vas a
tomar. Ningún destino es conocido solamente deseado. Recuerdo que no conoces
nada, pero deseas todo. Eso es parte de la vida: desear, anhelar, soñar.
¿Desear?
¿Anhelar? ¿Soñar? Ninguno de los tres se cumple en mi vida.
Todos
se cumplen, tus deseos, tus anhelos y tus sueños más simples se cumplen a cada
instante porque si no estarías con vida.
¿Deseo?
Deseas.
¿Anhelo?
Anhelas.
¿Sueño?
Sueñas.
Con una vida distinta y turbia o quizá clara, pero distinta o probablemente
igual. Sueñas, anhelas y deseas. En la vida y la frustración de un secreto, de
un destino.
Excelente :)
ResponderEliminarQue bueno que te gustó, muchas gracias
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